PLURALIDAD

Queridos amiguitos, un encuentro más. Soy Pilar Bardem, me conoceréis por mis estelares papeles cinematográficos como protagonista en “La Momia”, “Rojos”, “La novia de Frankstein” y “Parque Jurásico” donde hice el dificil papel del T-Rex. Me encanta escribir para vosotros, y como he sido iluminada por las más altas deidades marxistas, tengo la misión de aleccionar al perdido, al iletrado, al inculto, es decir a todos vosotros.

Hoy vengo a hablaros de la pluralidad, ese concepto tan democrático y que asegura que todos los colectivos estén representados dentro de las esferas socio-culturales y políticas de un Estado de Derecho (o como me gustaría a mi, un Estado de Izquierdo).

El ejemplo claro lo tenemos en Venezuela, punta de lanza de las libertades y quintaesencia de la pluralidad. Mi querido amigo Chávez, presidente electo, ha decidido cerrar la cadena Radio Caracas TV (RCTV), la más antigua del país. Os preguntareis por qué, pues queda claro, para salvaguardar la pluralidad en su ejemplar democracia.

La pluralidad básicamente consiste en que gente completamente indispensable para el desarrollo de la cultura y la información, por ejemplo yo, musa del celuloide, oráculo de sabiduría, astrolabio de la verdad y pigmalión de la hez; pueda actuar pluralmente, es decir, que aparezca en TODAS las películas, en TODAS las televisiones, en TODOS los libros, en TODOS los periódicos, etc. a la vez. Si sólo aparezco en uno, eso es singular, si aparezco en TODOS es plural, ¿véis que sencillo?

Eso impide que los ham-burgeses, derechotes, católicos, liberales, todos fascistas y demás zotes, tengan acceso al público, y por tanto, se garanticen los derechos de los únicos verdaderamente democráticos y moderados, nosotros, los marxistas-leninistas, los estalinistas-maoístas, los chavistas, los fidelistas, los etarras, los anarquistas, y demás libertarios.

Que fantástica es la pluralidad, me hincho a hacer detritus de películas, amasó una verdadera fortuna junto con mis amigos, ya que todos somos una pluralidad, y se cumplen los principios democráticos de los que he hablado. Hugo Chávez sabe lo que hace, e incluso tras el cierre de RCTV, se ha ofrecido para hacer los documentales de orangutanes de la tele, por eso del gran parecido, intelectual claro.

Anda que no es bonito aprender conmigo, no se que sería de la democracia sin mi. Hasta pronto mentecatos.

GESTAPA: UN HOMBRE, UNA TARJETA

Un hombre, una tarjeta. Tarjetas, exacto, eso es lo que se utilizaba en la Prinz Albrecht Strasse nº8 de Berlín. Para cada tarjeta había una persona, o más bien para cada persona había una tarjeta. Allí tenía su casa la infausta, terrorífica y no menos eficaz policía secreta del régimen nazi, la Gestapa -Geheime Staatpolizeiamt- (Oficina de la Policía Secreta del Estado).

Esta organización policial llamada Gestapa – conocida vulgarmente toda ella como la Gestapo-, fue creada alrededor del año 1933, y aglutinó en un principio varias organizaciones policiales preexistentes bajo un solo mando, divididas en cuatro abteilung (departamentos): Abt. I –Organización y Administración-, Abt. II - departamento legal- (la gestapa estaba infestada de abogados), Abt III – la GESTAPO (Geheime Staatpolizei – Policía Secreta del Estado) propiamente dicha y la conocida por el gran público y Abt. IV – la Abwerhpolizei – (departamento de contraespionaje). Tras su creación al mando directo de Göering, todo esto quedo bajo el mando del santito Reinhard Heyndrich, mejor esbirro de Himmler, el cual dejó el cargo posteriormente.

Durante el mandato de Heydrich se constituyó un sistema de información sobre sujetos perjudiciales o "potencialmente perjudiciales" para el régimen nazi. Este sistema consistía en fichas individuales, plasmadas en tarjetas, sobre las cuales se rellenaban hasta con los datos más íntimos de cada sujeto bajo investigación (cuyo número llegó a ser escalofriante al final del año 1944). Las tarjetas se escudriñaban y renovaban dos veces al año, y se elaboró un sistema para su distinción mediante grupos, siendo el grupo “A” el que incluía los denominados sujetos “peligrosos”. El famoso grupo A, se subdividía en:
- Grupo A1: Distinguía, mediante una etiqueta roja a la derecha de la ficha, aquellos sujetos que deben ser arrestado inmediatamente cuando se decrete la movilización general. (¿ya se intuía una guerra?)
- Grupo A2: Con etiqueta azul, distinguía a las personas a arrestar tan sólo tras el anuncio de movilización general.
- Grupo A3: De etiqueta verde, incluía a las personas, que sin ser peligrosas, es recomendable su arresto en tiempos de estres. (!toma ya! ¿que son tiempos de stress?)

Más tarde se añadieron colores, naranja, amarillo, marrón, etc., para comunistas, marxistas, asesinos, maleantes y más tarde para masones, homosexuales, gitanos, judíos, etc.; sistema que posteriormente se traslado a los campos de concentración.

La GESTAPO tenía la potestad de arrestar a personas bajo "sus criterios", y mantenerlas bajo custodia durante ocho días sin informar de su arresto, sin presencia de abogado o juez alguno, y se hizo  el arresto de esa manera, algo institucional, siendo marca de la casa el llamado “arresto preventivo”,. Por supuesto, miles y miles de estos arrestados llevados a Prinz Albrecht strasse nº8, simplemente no volvían nunca a su casa, y acababan con un disparo en la nuca o tras una alambrada de un campo de concentración. Método limpio y sin rastro, sólo tarjetas.

Su terrorífica fama fue ganada a pulso, y sus ropas civiles monocolor, su eficacia y métodos, infundían miedo y terror, incluso entre los altos cargos del Reich. Todos eran personas, todos tenían tarjeta. ¿Qué hubieran conseguido con un ordenador?.

Finalmente el edificio del nº8 de la calle Prinz Albrecht fue demolido por los rusos al acabar la IIGM y actualmente es un solar que alberga una exposición pública llamada Topografía del Terror.
"Sólo temo a mis enemigos cuando empiezan a tener razón"- Jacinto Benavente

LA ULTIMA ARMADA DEL ZAR

!Que libro tan divertido! Es un libro de historia militar, eso si, con unas dósis de aventura dignas de Emilio Salgari. La última Armada del Zar de Constantine Pleshakov, decribe la epopeya, y creédme que fue una epopeya, de la flota rusa que va a enfrentarse a la homónima japonesa, las cuales se encuentran finalmente en Tsushima, con el catastrófico resultado para uno de los contendientes.

El libro describe el incidentado viaje de meses que realiza la flota imperial desde sus bases del Báltico, rodeando 3 continentes (Europa, África y prácticamente Asia), hasta llegar a las costas de Corea, bajo el mando del Almirante Rozhestvenski. La historia desde luego es trágica, pero tantos y tan variados incidentes, convierten un relato militar, con tintes épicos, en algo desde luego epopéyico. En suma casi casi, es un libro de aventuras. Es divertido desde el mismo principio; si acaso lo peor es precisamente el desenlace, el relato propiamente militar.

Hay un gracioso error del autor, que los hispanos debemos pasar por alto, porque tiene más gracia que torpeza, a manos de un escritor ruso. En su página 127 (edición española) dice que la flota ancla en el puerto de Vigo, señalando que "desde sus barcos los rusos podían ver las majestuosas cumbres de Los Pirineos y el azul de los mares del Sur". Desde Vigo ver los Pinineos, se me antoja dificil, pero huele a licencia poética de un escritor de país tan lejano.
Con eso ya sabemos señores que Pleshakov nunca ha estado en Vigo, o siquiera en España, y que escribiendo este capítulo pasó de ver un mapa. Pero el error es cachondo. "Los Mares del Sur" "Las majestuosas cumbres de los Pirineos", suenan muy romántico, pero desde Vigo, nanai russky.
Aún así el libro es fantástico y entretenidisimo. No perdaís rípio de cuando erlata lo de los monos y cocodrilos a bordo.

...y despues descansó.

...y despues descansó.